La fotografía de Alessandra Sanguinetti y la política del deseo.

Enfoque

¿Qué nos ofrece la fotografía realizada por una mujer?, ¿hasta qué punto puede el arte modificar nuestra perspectiva sobre el mundo?, ¿hasta dónde estamos dispuestos a llegar en torno a la reflexión sobre el deseo y sobre la representación no estereotipada de la mujer? Sin lugar a dudas, el arte es una puerta abierta a ver las cosas desde otro punto de vista, como antes nunca lo habíamos imaginado y sentido. Desde esta perspectiva, proponemos un acercamiento a la fotografía de Alessandra Sanguinetti (1968), desde la ternura pero lejos del pudor, que nos servirá como punto de partida para reflexionar sobre diferentes temas como son los afectos y las emociones desde la perspectiva de género, enmarcados en la teoría feminista, la teoría queer y las políticas del deseo (política cultural de las emociones). Trataremos de interrelacionar dichas teorías con la propuesta fotográfica de Alessandra Sanguinetti y veremos que nos permite transitar por caminos llenos de nuevas posibilidades para el placer visual, la reflexión y la observación donde se logran subvertir (al menos instantáneamente) los valores hegemónicos.  

Las imágenes fotográficas que nos muestran “Las aventuras de Guille y Belinda y el enigmático significado de los sueños” (Buenos Aires, 2003), una trilogía fotográfica que propone Sanguinetti, son, por momentos, un lugar mágico que despierta a partir del imaginario de las dos protagonistas y su complicidad con la fotógrafa. Sin embargo, este espacio liminal representado como una ensoñación (sobre todo en la primera parte de la trilogía, cuando la niñez está más presente) se sitúa en un entorno rural, marginal e incluso a veces triste -veremos las razones-. Donde los dos personajes, Guille y Belinda, viven, aman y sueñan. Parece idílico y lo es. Sin embargo, seremos testigos de cómo el sueño desaparece rápidamente. Lo que nos interesa de esta obra en torno al concepto coming-of-age, es pararnos y reflexionar acerca del lugar utópico del que parten estos dos personajes y cómo asumen los roles y estereotipos más tradicionales, que se les asigna como género femenino en el entorno rural. Veremos las limitaciones que documentan este duro proceso. 

 

Por eso, creemos que este proyecto fotográfico nos permite acceder a temas relevantes para este congreso en relación con las viejas prácticas (como la fotografía) y las nuevas fronteras (teoría del feminismo, perspectiva de género, etc.) en tanto que las imágenes son poderosas, bellas en su aspecto formal, pero al mismo tiempo liminales en el sentido conceptual, pues muestran un espacio de ambigüedad entre la realidad y la ficción y su proceso de mixturización. Estas imágenes nos resultan de gran ayuda porque nos permiten interrelacionarlas con las políticas del deseo que se derivan de ellas, para comprender mejor la situación de estas dos mujeres en un entorno rural. Desde esta perspectiva, se nos abren las posibilidades para reflexionar sobre los cambios morfológicos, físicos y psíquicos que atraviesan Guille y Belinda, personajes situados en la periferia y los márgenes más allá de la mirada eurocentrista y heteronormativa.